Los policías en rebeldía mantuvieron ayer el tercer día consecutivo de huelga para reclamar un aumento salarial. Aunque sin los incidentes registrados el sábado, las mayoría de las comisarías de la capital permanecieron con las guardias mínimas de atención al público. Para hoy, antes del mediodía, está prevista una nueva audiencia entre el ministro de Gobierno, Edmundo Jiménez, y una comisión de los agentes en el Palacio Gubernamental. Los policías reclaman un aumento en la Asignación por Grado: para el cargo testigo (agente), ese monto está en $ 1.950 y piden al Gobierno que lo eleve a unos $ 3.500. Además, exigen el cumplimiento del pase a planta permanente de todo el personal contratado.
Al cuarto día de paro, Gobierno y policías buscan una solución
Persiste la protesta de los uniformados.